UN POCO DE HISTORIA: El río Henares es otro de esos pequeños ríos que pasa desapercibido para la gran mayoría de la población española, muchos se olvidan que de las pequeñas corrientes nacen los grandes ríos. Todos ellos son importantes y el Henares no es menos. En la antigua Iberia se denominaba Tagonius, ese es el término que aparece en antiguos mapas. Bajo la dominación árabe recibió el nombre de Guadalajara (Wad al-hayara) que en su traducción significa río de piedras. Debido a la enorme cantidad de cantos rodados que existen en su cauce. Este nombre pasó a la vecina capital alcarreña y la denominación del río pasó a ser "Henar" (campo de heno), ya que en otros tiempos el heno era el cultivo más abundante en sus orillas.
Para alguien que nació a 1.220 metros de altitud, altivo y señorío el río Henares pierde su gallardía al bajar de las tierras altas. Su fuente se sitúa a nordeste de Horna, muy cerca de Sigüenza. Sin duda Guadalajara se ha quedado con lo mejor del río Henares. Ya que de sus 160 kilómetros, Guadalajara posee 124 de ellos. En ese tramo le tributan el Sorbe, Cañamares, Salado, Dulce, Aliendre y Bornova, todos por su orilla derecha. Entra en la Comunidad de Madrid a la altura de Los Santos de la Humosa y baja serpenteando en dirección a la ciudad de Alcalá de Henares, cuna de Miguel de Cervantes.
EL RÍO: Me considero un afortunado en tener este río a 15 minutos de mi hogar. Fue el primer río en que pesqué en España y el que mejor conozco. He pateado y pescado en prácticamente toda su extensión con grandes alegrías. Su poco calado que en raras ocasiones llega a los 5 metros de profundidad, hace creer que debido a eso no alberga peces de dimensiones extraordinarias. Nada más lejos de la realidad. En prácticamente toda su extensión el Henares desarrolla una serie de terrazas fluviales en su margen derecha y una vertiente abrupta en su margen izquierda. En los periodos de intensas lluvias se da un proceso de sedimentación, arrojando grandes cantidades de sólidos al río, debido al embiste de sus aguas contra la margen izquierda. Es precisamente esa acción que ha dado lugar a los cantiles, también denominados terreras. Este proceso sedimentario de arcillas y arenas de origen terciario ha dado lugar a la formación de islas, barreras y divisiones del cauce en distintos brazos. Entre los cuales podemos destacar los meandros de la Isla del Colegio en Alcalá de Henares, el Soto de Aldovea y el Cerro Gordo de San Fernando. El río Henares posee varios azudes que ralentizan su caudal, he escrito anteriormente artículos sobre algunos de ellos. En la zona de Alcalá de Henares podremos encontrar el azud de Cayo.(https://paraisosparapescar.blogspot.com/2013/05/el-rio-henares-el-azud-de-los-colonos.html.)



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